Asociaciones entre los eosinófilos en sangre y la disminución de la función pulmonar en adultos con y sin asma
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Asociaciones entre los eosinófilos en sangre y la disminución de la función pulmonar en adultos con y sin asma
Hancox RJ, Pavord ID; Sears MR.
EurRespir J. 2018; 51: 1702536
Revisora
Astrid Crespo Lessmann
Servicio de Neumología. Hospital de la Santa Creu i de Sant Pau. Barcelona. Institut d’Investigació Biomèdica Sant Pau (IIB Sant Pau). Universitat Autònoma de Barcelona. Barcelona.
Tema: Eosinófilos y función pulmonar en asmáticos.
Palabras clave: asma, eosinófilos, función pulmonar.
Resumen
La asociación entre la inflamación eosinofílica y el remodelado de las vías respiratorias no está clara. Este estudio evaluó las asociaciones entre los eosinófilos en sangre periférica y la disminución de la función pulmonar en una cohorte de adultos jóvenes a los 21, 26, 32 y 38 años, ajustados por sexo, tabaquismo, asma y por la espirometría a los 18 años.
Los eosinófilos más altos se asociaron con un volumen espiratorio forzado del 1s (FEV1), una capacidad vital forzada (FVC) y un % del FEV1 antes y después del broncodilatador más bajo. Aunque los recuentos de eosinófilos fueron más elevados en los pacientes con asma, las asociaciones fueron similares en los participantes con y sin asma. Así, este artículo concluye que los eosinófilos en sangre se asociaron con obstrucción al flujo aéreo y una mayor disminución de la función pulmonar, independientemente del asma y del tabaquismo, siendo estos un factor de riesgo incluso en aquellos pacientes sin síntomas.
Es conocido que controlar la inflamación eosinofílica con corticosteroides inhalados reduce las exacerbaciones, pero aún no se ha demostrado que estos impidan el desarrollo de una obstrucción fija del flujo aéreo. La forma más directa para valorar el efecto de la inflamación eosinofílica pulmonar sería a través del esputo inducido. Sin embargo, debido a que no es un método difundido en la práctica clínica o en estudios epidemiológicos a gran escala, el recuento de eosinófilos en sangre periférica ha emergido como un marcador fácil de medir. Los niveles elevados de eosinófilos en sangre se asocian a un mal control del asma y a un riesgo de tener exacerbaciones, y predicen la respuesta a terapias biológicas, como por ejemplo, los tratamientos anti-IL5 en el asma.
Los datos de este estudio fueron obtenidos del “Estudio Multidisciplinario de Salud y Desarrollo de Dunedin”, que es una investigación longitudinal de la salud y del comportamiento en una cohorte poblacional no seleccionada de individuos nacidos en 1972/1973 en el único hospital de maternidad de Dunedin.
El asma infantil fue definida por los padres por síntomas compatibles o tratamiento utilizado. El asma del adulto se definió con síntomas o medicamentos compatibles sugestivos de asma de forma informada por los propios pacientes. El recuento de eosinófilos se obtuvo en las edades de 21, 26, 32 y 38 años. Un recuento de eosinófilos > 0,4 × 109 células x L-1 fue considerado elevado. Las espirometrías (pre y postbroncodialtador) se realizaron a los 18, 21, 26, 32 y 38 años.
El recuento de eosinófilos fue más elevado a la edad de 21 años, pero no fue significativamente diferente entre las edades de 26, 32 y 38 años (todas
pairwise p ⩾ 0,054). Se encontraron recuentos elevados de eosinófilos en un 20% de los pacientes con asma y en un 8% de los que no tenían asma; el recuento se mantuvo alto en la siguiente medición en un 52% y 42% respectivamente.
El recuento de eosinófilos se asoció con una relación FEV1/FVC pre y postbroncodilatador menor y con bajos valores de FEV1 (ajustados a las sibilancias). Los eosinófilos más altos se asociaron con mayor disminución del FEV1/FVC y FEV1 en ambos grupos, aunque la asociación con FEV1 no fue estadísticamente significativa entre los asmáticos (p = 0,052). Después del ajuste por paquete de años fumados, todos los coeficientes fueron estadísticamente significativos (valores p ⩽ 0,033).
Comentario
Los autores describen que, hasta donde saben, este es el primer estudio que explora las asociaciones longitudinales entre los eosinófilos en sangre y la función pulmonar en una muestra de población general. Aunque los participantes con asma tenían una media más alta de eosinófilos, estos se asociaron con una peor función pulmonar y disminuciones similares
en FEV1 y FEV1/FVC entre participantes con y sin asma e incluso entre aquellos que no informaron síntomas de sibilancias. Esto sugiere que la inflamación eosinofílica puede empeorar la disminución de la función pulmonar y aumentar el riesgo de tener EPOC en aquellos pacientes fumadores o exfumadores.
Los puntos fuertes de este estudio fueron: haber realizado cuatro mediciones de eosinófilos y espirometrías a lo largo de los años, tener una alta tasa de seguimiento y ajustar muchas covariables que pudiesen modificar los resultados. Sin embargo, en cuanto a sus limitaciones, no se realizó recuento de eosinófilos en el esputo y los diagnósticos de asma fueron declarados por los propios pacientes, lo que pudo haber llevado a una clasificación errónea. Se necesitarían más ensayos clínicos controlados aleatorizados y prospectivos para establecer si el tratamiento de la inflamación eosinofílica con corticosteroides inhalados mejoraría a largo plazo la función pulmonar en la EPOC o en el asma.
